«Faber est suae quisque fortunae»

(Apio Claudio)

«Hinc tibi certandi bona parcendique uoluptas:

quos timuit superat, quos superauit amat»

(Rutilio Namaciano)

sábado, 30 de septiembre de 2017

El mejor "no-prólogo" que he leído

Chico y Ortiz, J.Mª., Estudios sobre Derecho Hipotecario, tomo I, 3ª ed. puesta al día, Marcial Pons, Madrid, 1994, págs. 12 y 13.

«Real Academia Española, Palma de Mallorca, 15 de enero de 1981, Sr. D. JOSÉ MARÍA CHICO Y ORTIZ. Fernández de la Hoz, núm. 21, 4.º, Madrid-10.

Mi querido amigo:

No es que no quiera: es que ni puedo ni sabría. Uno es relativamente osado, diríamos que osado dentro de un orden, pero el valor tiene un límite, como el estreñimiento de las damas cumplidas y la propensión al martirologio, y mi entusiasmo por el riesgo se ha visto muy mermado por los acaeceres que me rodean y que cada vez entiendo menos. A mí, ¡qué quiere!, me desorienta mucho el gran guiñol del que somos espectadores, mal que nos pese, y en el que actúan cristobitas tan heterogéneos como el Papa Wojtyla, el emperador Bokassa, el ayatola Jomeini y doña Pilar Franco Bahamonde, ésta a escala más diocesana y doméstica.

Uno carece de títulos para prologar un libro como el suyo, cuyo solo contenido me estremece y hasta me llena de congoja. El haber naufragado en unas oposiciones tan distantes ya, que sobre su recuerdo pasaron dos guerras, y el haber sido suspendido en Derecho civil por un auxiliar sonrosado y con pretérito buen acomodo, no son credenciales suficientes para encabezar un libro de ciencia jurídica. Yo no sé una palabra de lo que usted dice en sus páginas y el haber llegado a mi edad, casi provecta, ignorando lo que puede ser la enfiteusis, por ejemplo, o la antipoca, supongo que me da cierto derecho a pasar a mejor vida (si cabe) conservando estas últimas virginidades.

Usted me hace mucho honor pidiéndome unas palabras preliminares; lo que no me explico es para qué las quiere. También usted sabe que hace cinco años, sobre poco más o menos, me quité de hacer prólogos aunque, a veces, incumpla mi propósito. Ahora estoy en la etapa de quitarme poco a poco de las permanentes incitaciones que nos acechan; hace cuatro años me quité de besar la mano a las señores; hace tres, me quité de fumar; hace dos, me quité de comer más de lo que me cabía; y hace uno, me quité de pegar patadas a los cubos de basura. Se conoce que voy para viejo. Un cura paisano y amigo mío me recomendó no dejar los vicios —cosa que siempre conforta y robora, como decía Azorín, de cierto vino dadivoso—, con el argumento, a todas luces evidente, de que ya son los vicios los que nos van dejando a nosotros.

Las oposiciones son un disparate; esto es lo que pensamos todos los españoles menos los que acaban de ganar la oposición. Pero el quitarlas de golpe pudiera ser que nos acarrease mayores males que los que ya padecemos, lo cual no sería política preconizable. A mí no me parece que sea bueno eso de que alguien, a veces, pueda tener toda la razón. A quien se da toda la razón se le capa, al menos, el derecho al pataleo, que es siempre tan reconfortante. A mí me parece más prudente que cada cual tenga su miajita de razón, aunque no le sirva de mucho, porque eso le ayuda a seguir viviendo y soñando.

Usted ha caído en el vicio hispánico de las prisas y me pide en enero un prólogo para febrero. No importa. El prólogo no se lo hago porque no sé, pero esta carta puede usarla si le conviene.

Salud y paz, en el 1981 y siempre para todos, es el mejor deseo de su buen amigo que le abraza. CAMILO JOSÉ CELA».

jueves, 28 de septiembre de 2017

La Presidenta del MUS y "El Príncipe" de Maquiavelo

Maquiavelo, como estratega, no es ajeno a las finanzas. Por ejemplo, Luis Valls fue llamado el “Banquero Florentino” o “el Maquiavelo de la Banca”. El Diccionario de la RAE define “maquiavélico” como “astuto y engañoso, lo que nos parece, en cuanto al “engaño”, excesivo. Pero ahora no nos interesa el adjetivo, sino la propia persona del estadista florentino, a propósito de unas palabras pronunciadas por la responsable del MUS.


La Presidenta del MUS, la Sra. Nouy, ha realizado unas llamativas declaraciones a su paso por Madrid. Nos referimos al discurso titulado “Too much of a good thing? The need for consolidation in the European banking sector”, pronunciado en Madrid el 27 de septiembre de 2017, en el marco del VIII Financial Forum.

Aunque los banqueros deben ser cautos y discretos, la Presidenta del MUS los incita a ser valientes y a la acción, saliendo de los muros que les dan cobijo. Tras afirmar algo que la realidad parece contradecir, como es que la Unión Bancaria facilita las fusiones transfronterizas (nos remitimos a nuestro artículo “¿Concentraciones bancarias transfronterizas en la Unión Europea?”, Estrategia Financiera, nº 350, 2017), afirma lo siguiente:

“All that’s missing is brave banks that will set sail to explore and conquer this new territory”.

Se aprecia en su expresión un cierto gusto por Maquiavelo, que bajo la rúbrica X de “El Príncipe” ("De qué modo deben medirse las fuerzas de todos los principados”) escribe lo siguiente:

“Conviene tener, al examinar las clases de estos principados, otra consideración: es decir, si un príncipe tiene tan gran Estado que, en caso necesario, pueda regirse por sí mismo, o si tiene siempre necesidad del auxilio de otros. Y, para aclarar más este punto, digo que juzgo que pueden sostenerse por sí mismos los que por abundancia de hombres o de dinero puedan formar un ejército suficientemente poderoso como para dar batalla a cualquiera que llegase a atacarlos: y juzgo que tienen siempre necesidad de otros los que no pueden salir de campaña contra los enemigos, sino que se ven obligados a refugiarse dentro de sus muros y a guardarlos”.

En unos tiempos tan agitados, parece que se impone, también en las finanzas, la máxima atribuida a Vegecio que exacerba la competencia y la supervivencia de los más aptos: “si vis pacem, para bellum”.


martes, 26 de septiembre de 2017

domingo, 24 de septiembre de 2017

Reseña de “The end of alchemy. Money, banking and the future of the global economy”

Mervyn King ha sido el Gobernador del Banco de Inglaterra entre 2003 y 2013, es decir, durante los años de incubación, explosión e inmediata gestión de la crisis financiera. En esta obra ofrece su privilegiada visión de la crisis, aporta su punto de vista y opina sobre cuál debería ser la evolución de la economía y las finanzas para tratar de evitar una repetición, que sería mucho más deletérea, de los hechos.


viernes, 22 de septiembre de 2017

Seis entrevistas sobre economía colaborativa (Extoikos, nº 19)

La potencialidad de la economía colaborativa va mucho más allá de lo que podemos imaginar. No se trata de una promesa de futuro sino que, en muchos aspectos, las plataformas son una realidad que ya se utiliza en el día a día por los ciudadanos, como se muestra en la entrevista al usuario de una de ellas, Javier Marín, que es asiduo de BlaBlaCar y, como se puede comprobar, está más que satisfecho.

José María Hidalgo, profesional de la informática, aporta interesantes reflexiones que superan ampliamente las fronteras de su sector, para adentrarse en la verdadera razón de ser de las plataformas, que, en su opinión, deberían huir, en contra de la tendencia que se puede apreciar, de fines crematísticos. Su visión confirma que cualquier acercamiento a la economía colaborativa debe acometerse partiendo de varias disciplinas.

Ignacio Gomá, abogado buen conocedor de las monedas virtuales, sus potencialidades y su problemática, se inclina por un mundo en el que las monedas emitidas por los bancos centrales compartirán protagonismo con las monedas virtuales, de las que Bitcoin no es más que una entre otras 800. Las monedas virtuales habrán superado la prueba crucial cuando sean, sin oscilaciones excesivas, una auténtica reserva de valor. Pero la base del sistema de estas monedas, que es el “blockchain”, tiene capacidad para ser útil en muchos otros ámbitos distintos del estrictamente “monetario”.

En la entrevista a Enrique Fernández Albarracín, que es Socio Responsable de Regulación Financiera de EY España, se trata sobre las tendencias de la innovación en el ámbito de la prestación de los servicios financieros. La crisis bancaria y el deterioro de la reputación de las entidades financieras tradicionales ha propiciado que surjan las denominadas empresas “Fintech”, lo que, unido a la posibilidad de tratar ingentes cantidades de datos y predecir tendencias en base a dicho tratamiento, alterará la preeminencia de los bancos tradicionales y de los servicios que han venido prestando últimamente. Especialmente relevante nos ha parecido su reflexión, que compartimos, en cuanto a la necesidad de que Europa disponga cuanto antes de un sistema financiero sólido que le permita competir, en igualdad de condiciones, con los de otras áreas pujantes del planeta.

Francisco Pertíñez, profesor de Derecho Civil en la Facultad de Derecho de la Universidad de Granada, se centra en sus respuestas en un aspecto tan crucial como es el de la adecuada protección del consumidor ante las nuevas tendencias. La clave, en su opinión, está en saber cuándo una plataforma opera realmente como empresario, pues solo en estos casos se aplicará la normativa para la protección de consumidores. Aunque lo deseable sería disponer de directivas o reglamentos comunitarios, será inevitable que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, como ya ha ocurrido con las cláusulas abusivas, tenga que tomar cartas en el asunto, concluye.

Enrique Sanjuán, magistrado de la Audiencia Provincial de Almería, parte, precisamente, de que la falta de regulación puede terminar trayendo problemas y abusos en perjuicio de los consumidores y de los ciudadanos en general. Aunque no cree realista que se promulgue una normativa internacional que regule las plataformas, sí cree que hay un ámbito en el que concurrirá el acuerdo de los Estados con carácter prioritario: la protección de la competencia.

La economía colaborativa y la titularidad de los medios de producción

La economía colaborativa continúa su expansión —no sin cierta polémica— apoyada en el cambio tecnológico y en las renovadas preferencias de los consumidores. Son abundantes las cuestiones que merecen una respuesta, aunque este artículo se centra, tras una exposición introductoria, en la constatación de que, a diferencia de lo ocurrido hasta el momento, la titularidad de los medios de producción por las nuevas empresas no es un elemento esencial para el ejercicio del control sobre la plataforma y para la dirección efectiva de la acción de los proveedores materiales del servicio (en los casos en que se trate de terceros no ligados a la plataforma por medio de una relación laboral.


jueves, 21 de septiembre de 2017

La financiación colaborativa también tendrá su Shylock

La financiación a través de plataformas es uno de los sectores más pujantes de la economía colaborativa. Aunque sus logros, en términos de volumen de crédito concedido, son discretos, el sector crece mundialmente a un nivel más que aceptable.  La regulación debería tratar de armonizar los intereses de los nuevos actores digitales, particularmente de los oferentes de financiación y de las plataformas, de los inversores y de los demandantes de crédito.